Denuncia en la Guardia Civil la amenaza de un escolar a otro
Un alumno de 11 años de edad le dijo a un compañero de clase, de 10 años, que iba a traer una navaja para 'pincharle', con presencia de testigos. Así queda recogido en la denuncia presentada por la madre del chaval amenazado. El CEIP San Isidoro de El Algar, aplicando el protocolo para estas situaciones, ha expulsado al autor de las amenazas hasta el lunes, pero el amenazado tiene miedo y no quiere volver al centro, considerando su progenitora que la medida adoptada en el centro es insuficiente para asegurar la seguridad de su hijo, llevando el incidente al cuartel de la Benemérita en El Algar.
Mañana del pasado lunes (20 de octubre). En una aula del colegio San Isidoro de El Algar se está elaborando un cartel con el mensaje 'Stop bullyng'. El chico que está inmerso en su elaboración le dice a un compañero que es un pesado y que lo deje en paz, pues no para de molestarle. Entonces, el que dirigió esas palabras se tiró al suelo simulando una agresión mientras gritaba. La profesora no lo creyó y le dijo que volvería a mandarlo a dirección "como siempre". Más tarde, en los baños, ambos niños coincidieron en los aseos y el que simuló la caída le dijo al otro que "esto no va a quedar así", que traería una navaja y que le iba "a pinchar". Hubo testigos de dicha escena.
El párrafo anterior recoge el relato que el escolar de 10 años de edad expuso a su madre por la tarde, cuando, mientras estudiaba, se puso a llorar y dijo que no quería volver al colegio. En la mañana siguiente, martes, la madre de la víctima acudió al CEIP San Isidoro de El Algar para denunciar lo sucedido, hablando con la jefa de estudios, según nos explica la progenitora: "Reconoció que el otro niño era conflictivo y afirmó que iba a averiguar los sucedido". Esa misma tarde, se enteró que el escolar de 11 años de edad (es repetidor) iba a ser expulsado tres días y que no regresaría hasta el lunes a clase, "pero me enteré por el grupo de WhatsApp de madres de alumnos y no me dio gusto alguno, pues considero que debían haber informado directamente a la familia del niño afectado sobre las medidas a adoptar, además de interesarse por cómo se encontraba mi hijo, por lo que me sentí desamparada", explica.
El miércoles se presentó en el cuartel de El Algar de la Benemérita, donde interpuso la denuncia ("Lo he hecho pensando en que mi hijo tenga la máxima seguridad", explica al ser preguntada), a raíz de la cual agentes de la Guardia Civil acudieron al centro docente para indagar sobre lo sucedido.
La madre hace hincapié en que su hijo "tiene miedo y no quiere volver el lunes al colegio, pues teme represalias, pues quien lo ha amenazado es un niño conflictivo y agresivo, como ha demostrado en el colegio y meses atrás en el CD Algar de fútbol, de donde lo echaron. No parece coherente la medida adoptada con la garantía de seguridad que debe tener cualquier escolar amenazado", indica, insistiendo en que la víctima es su hijo y que el centro debe conseguir que se sienta seguro, "no quiero que mi hijo tenga al lado a quien lo ha amenazado y si el lunes tiene miedo, no lo llevaré al colegio", remarca.
Esta redacción también ha contactado con el centro docente, desde donde se nos indica: "Debido a la debida protección de datos de los menores, sólo indicar que ante cualquier conflicto se aplica la normativa establecida en el Decreto 16/2016 de 9 de marzo de por el que se establecen la normas de convivencia en los centros educativos, tal y como se recoge en el 'Plan de convivencia' del centro".